Aún te recuerdo, en los días grises cuando yo misma me oscurezco. Recuerdo esa tarde y todas las cosas que no pasaron. Aún tengo días claros, cuando no sueño con tu pelo y con tus manos. Pocas veces, sin embargo se me olvidaron. Y vuelves a mí, cuando ya no quiero que vuelvas más. Me persigue tu sonrisa y no la puedo borrar, ahí está, entre mis labios. Si alguna vez te quise o me quisiste nadie lo sabe, bueno, yo sí, pero no voy a contarlo.