Aún te recuerdo,
en los días grises
cuando yo misma me oscurezco.
Recuerdo esa tarde
y todas las cosas
que no pasaron.
Aún tengo días claros,
cuando no sueño
con tu pelo y con tus manos.
Pocas veces,
sin embargo
se me olvidaron.
Y vuelves a mí,
cuando ya no quiero
que vuelvas más.
Me persigue tu sonrisa
y no la puedo borrar,
ahí está, entre mis labios.
Si alguna vez te quise
o me quisiste
nadie lo sabe,
bueno, yo sí,
pero no voy a contarlo.